La CEPAL lanzó en Chile su informe Panorama Social 2018, que incluye nuevas revisiones de la metodología utilizada por el organismo para estimar la pobreza monetaria en la región, así como nuevas mediciones sobre desigualdad funcional, gasto social y doble inclusión laboral y social, así como un análisis de la autonomía económica de las mujeres ante los cambios en el mercado laboral.
La desigualdad de ingresos entre los hogares y las personas se ha reducido apreciablemente en la región desde principios de la década de 2000: el promedio simple de los índices de Gini de 18 países de América Latina bajó de 0,543 en 2002 a 0,466 en 2017. Por su parte, después de 12 años en que las tasas de pobreza y pobreza extrema de la región se redujeron considerablemente en la región, en 2015 y 2016 se registraron incrementos sucesivos de ambas tasas y las cifras de 2017 muestran un incremento adicional de la pobreza extrema, mientras que la tasa de pobreza no presentó variaciones respecto del valor registrado en el año anterior. Para 2018 se espera que el crecimiento del PIB contribuya a una ligera reducción de la tasa de pobreza y una mantención de la tasa de pobreza extrema (véase el gráfico).