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El Índice de Compromiso con la Reducción de la Desigualdad (Índice CRI), que alcanza este año su quinta edición, evalúa el compromiso de 164 países y regiones a la hora de abordar la desigualdad. El Índice CRI de 2024 ofrece nuevos y sólidos datos sobre la acción de los Gobiernos en torno a la reducción de la desigualdad, a través de políticas en los ámbitos de los servicios públicos, una fiscalidad justa y los derechos laborales. Este análisis revela que, en la inmensa mayoría de los países, las tendencias en cuanto a desigualdad son negativas en comparación con 2022. Cuatro de cada cinco países han recortado el porcentaje de su presupuesto destinado a educación, sanidad y/o protección social; cuatro de cada cinco han experimentado retrocesos en términos de progresividad fiscal; y nueve de cada diez, en el ámbito de los derechos laborales y los salarios mínimos. Nueve de cada diez países han retrocedido en uno o más de estos pilares; esto quiere decir que, si no se adoptan con urgencia medidas políticas para revertir esta alarmante tendencia, la desigualdad económica seguirá aumentando casi con total seguridad en el 90 % de los países. Si bien se han producido algunos avances, tanto el Fondo Monetario Internacional (FMI) como el Banco Mundial podrían hacer mucho más para priorizar en mayor medida la reducción de la desigualdad. En el presente informe se evalúan las acciones de ambos organismos en los tres pilares en los que se divide el Índice CRI: servicios públicos, fiscalidad y derechos laborales. Asimismo, el informe incluye recomendaciones sobre medidas urgentes que tanto el FMI como el Banco Mundial deben adoptar con el objetivo de dejar de promover políticas que agravan las desigualdades para, a cambio, apoyar otras que contribuyan a reducirla. |
