Autor institucional : | Revista de Educación. Ministerio de Educación, Cultura y Deportes. Número extraordinario 2012 |
Autor/Autores: | Marcela Román Carrasco Universidad Alberto Hurtado y F. Javier Murillo Torrecilla |
Fecha de publicación: | Diciembre de 2012 |
Alcance geográfico: | Estatal y Nacional |
Publicado en: | España |
Descargar: | Descargar PDF |
Resumen: | En Chile, desde la llegada de los gobiernos democráticos en 1990, el Estado y sus estructuras públicas han hecho un sostenido y gran esfuerzo tanto por mejorar la inversión en educación como por desarrollar programas educativos centrados en la mejora de su calidad y en disminuir las brechas y desigualdades sociales de la población escolar. En este artículo se describen y analizan las principales políticas educativas de los últimos veinte años centradas en el apoyo a las escuelas que acogen a estudiantes de sectores vulnerables y con bajos resultados académicos. Se estudian, en primer lugar, los programas focalizados que se desarrollaron en el país entre 1990 y 2007, entre los que se encuentran los de Mejoramiento de la Calidad de Escuelas Básicas de Sectores Pobres (P900), Mejoramiento de la Calidad de la Educación Rural (PRural), Intercultural Bilingüe, Escuelas Críticas y Escuelas Prioritarias. De su análisis destaca que existen limitaciones, puesto que no se consideran los factores extraacadémicos y también que es necesario asimilar una política educativa proequidad con acciones de discriminación positiva. El estudio y análisis crítico de la actual política educativa, la Ley de Subvención Escolar Preferencial (SEP), centra la segunda parte. Con este se concluye la necesidad de seguir desarrollando políticas y acciones compensatorias y focalizadas que se enmarcan en estrategias más amplias que asuman la formación integral de los sujetos en relación con el contexto, su historia, su comunidad y su cultura; políticas para una ciudadanía democrática, de sistemas y escuelas que modelen y promuevan procesos de socialización inclusivos, solidarios, tolerantes e igualitarios, capaces de hacer realidad los proyectos de vida de cada niño y de cada joven, pero también relevantes para una formación ciudadana que se constituye en palanca y soporte de sociedades justas, igualitarias y participativas. |