| Resumen: |
Los principales problemas de nutrición en la
región Mesoamericana son el retardo en talla y
la anemia en niños menores de 5 años y la anemia en mujeres en edad reproductiva. Las poblaciones indígenas, áreas rurales y hogares en condiciones de pobreza son más vulnerables a estos problemas nutricionales, principalmente al retardo en crecimiento. A pesar de que la desnutrición aguda en niños menores de 5 años no es considerada un problema de salud pública, su prevalencia según las nuevas normas de crecimiento de la Organización Mundial de la
Salud (OMS) es relativamente alta en niños menores de 1 año en la mayoría de los países de la región. Asimismo, la reciente crisis económica y las condiciones de sequía extrema han causado el resurgimiento de la desnutrición aguda severa en Guatemala y posiblemente
en otros países.Una gran variedad de programas en la región implementan intervenciones de probada eficacia para el abordaje de los principales problemas de nutrición. Sin
embargo, a menudo no se implementan las prácticas necesarias para lograr que estas acciones eficaces sean también efectivas. Dentro de las intervenciones efectivas se encuentran la promoción de la lactancia materna y prácticas adecuadas de alimentación complementaria,
las cuales producen un impacto positivo en una
amplia variedad de indicadores de salud y deben
ser implementadas en todos los contextos. Otras
intervenciones que deben tener cobertura universal
incluyen las inmunizaciones, la promoción de la
higiene y la suplementación prenatal con hierro y ácido fólico. Se debe asegurar la implementación de estas intervenciones en las poblaciones más vulnerables.
Se proponen dos paquetes de intervenciones
para reducir la desnutrición en áreas con alta prevalencia de retardo en talla, deficiencia de micronutrientes, inseguridad alimentaria y pobreza; mientras que un tercer paquete de intervenciones se propone para áreas con mejores condiciones. Estos tres paquetes tienen
diferentes costos, niveles de efectividad e impacto en el desarrollo de capital humano. Se recomienda una base común de intervenciones en los tres paquetes (paquete básico de intervenciones). Esta base incluye: 1) la consejería sobre lactancia y prácticas adecuadas
de alimentación complementaria, 2) la suplementación con vitamina A, 3) la suplementación terapéutica con zinc, 4) la promoción de la higiene, 5) la suplementación
prenatal y 6) las inmunizaciones. Además de las
intervenciones básicas, el primer paquete incluye los programas de transferencias monetarias condicionadas y la distribución de alimentos complementarios fortificados. Este paquete
tiene el mayor impacto potencial en la reducción del retardo en talla y en el desarrollo de capital humano y al mismo tiempo, constituye el paquete de mayor costo. El segundo paquete incluye las intervenciones base y la distribución de alimentos complementarios fortificados. Este paquete también puede ser muy efectivo para reducir el retardo en talla a un menor costo.
En áreas con niveles bajos de inseguridad alimentaria y niveles moderados de retardo en talla, deficiencia de micronutrientes y pobreza, se puede implementar el tercer paquete el cual incluye las intervenciones base y la distribución de alimentos complementarios fortificados o micronutrientes en polvo. |