| Resumen: |
El debate entre las dos grandes
concepciones de la política social ha
resurgido. Este artículo argumenta que,
aunque la focalización tiene ventajas,
una estrategia basada en la universalidad
y la solidaridad es la más adecuada
para atacar la desigualdad y la pobreza.
La evidencia estadística demuestra
que los efectos redistributivos del gasto
público social son más importantes
cuanto mayor es la cobertura; en otras
palabras, que la mejor focalización
es una política universal. Pero una
estrategia de este tipo implica un
esfuerzo fiscal importante, por lo que
será necesario revisar los esquemas
tributarios de la región y, sobre
todo, trabajar en la construcción
de sistemas más progresivos. |