| Resumen: | El voluntariado existe en todas las sociedades
del mundo. Los términos que lo definen y las
formas de su expresión pueden variar según los
distintos idiomas y culturas, pero los principios
que lo inspiran son comunes y universales: un
deseo de contribuir al bien común, libremente y
con espíritu de solidaridad, sin esperar a cambio
ninguna recompensa
material.
La motivación de los voluntarios radica en un
deseo de conseguir justicia, igualdad y libertad,
valores presentes en la Carta de las Naciones Unidas.
Es probable que una sociedad que respalda y
alienta las diferentes expresiones del voluntariado
sea una sociedad que promueve el bienestar
de todos sus ciudadanos. Una sociedad que no
reconoce ni facilita las contribuciones de los
voluntarios se priva de aportaciones que podrían
mejorar el bienestar público.
Hace diez años, cuando proclamamos el Año
Internacional de los Voluntarios, la comunidad
internacional reconoció las contribuciones fundamentales
de los voluntarios en aras del progreso,
la cohesión y la resistencia de las comunidades
y países. Sin embargo, en nuestro esfuerzo por
acelerar el progreso hacia la consecución de los
Objetivos de Desarrollo del Milenio para el año
2015, las contribuciones de los voluntarios no
siempre se integran en las estrategias de desarrollo
y a menudo permanecen al margen del debate
sobre este tema.
El programa de Voluntarios de las Naciones
Unidas (VNU ) ha tomado la iniciativa de encargar
este primer informe de las Naciones Unidas sobre
el voluntariado para celebrar el décimo aniversario
del Año Internacional de los Voluntarios. Al resaltar
el potencial no reconocido del voluntariado, el
informe señala que la actual estructura en materia
de desarrollo está incompleta si omite las contribuciones
que pueden realizar los voluntarios. |