Foro Ministerial para el desarrollo en América Latina y el Caribe
Declaración de Panamá (2018)
Ver PDF Considerando Conscientes del progreso experimentado en la región de América Latina y el
Caribe, y de los procesos multidimensionales que han mejorado las condiciones
de vida de millones de ciudadanos, aún persisten desafíos estructurales que
impiden consolidar los logros del desarrollo y la llegada de este a todos los
sectores de la sociedad.
Considerando Considerando que las políticas públicas y las estrategias de inclusión deben
estar enfocadas a no dejar a nadie atrás, a la generación, articulación y
coordinación de acciones desde lo público y lo privado, que tomen en cuenta las
necesidades, condiciones y particularidades de los grupos poblacionales con
mayores niveles de vulnerabilidad, con una construcción anclada en la realidad
de los territorios específicos.
Considerando Reconociendo los esfuerzos efectuados en contra de los factores que agudizan la desigualdad, como son las diversas formas de discriminación que limitan las oportunidades; así como la necesidad de crear una visión multidimensional que, responda a la realidad de cada país.
Considerando Recordando la resolución 2(II) de la Conferencia Regional sobre Desarrollo
Social de América Latina y el Caribe, en su Segunda Reunión, celebrada en
Montevideo del 25 al 27 de octubre de 2017 que reconoce el efecto negativo de
las medidas económicas coercitivas unilaterales en el desarrollo económico y
social en los países objeto de estas medidas.
Afirmamos que la facilitación del intercambio de información, tecnología y
lecciones aprendidas entre los países miembros, es un mecanismo prudente
para innovar políticas de desarrollo, considerando las particularidades
socioeconómicas de los países del Caribe.
Considerando Tomando en cuenta el principio de no dejar a nadie atrás, las políticas e
implementación de estrategias para el desarrollo deben tomar en cuenta las
diversas realidades socioeconómicas de los países miembros, particularmente
las microeconomías vulnerables de los países del Caribe, cuyas economías han
sido fuertemente impactadas por condiciones meteorológicas extremas.
Reafirmamos nuestro compromiso con el cumplimiento de la Agenda 2030,
desde una perspectiva holística que garantice la participación de todos los
sectores y fuerzas vivas de la sociedad, sustentada en las dimensiones sociales,
económicas y ambientales del Desarrollo Sostenible, que permitan promover
instituciones inclusivas, efectivas y transparentes, y sociedades justas y
pacíficas; bajo los principios de indivisibilidad, interdependencia y
complementariedad de los derechos humanos, asociados con los ODS.
Considerando Comprometidos con la amplia e innovadora visión del desarrollo sostenible
para el logro de cambios estructurales progresivos, sustentables y anclados en
un nuevo orden, que reconoce las alianzas nacionales, regionales y mundiales, y
la superación de la desigualdad como hitos fundamentales para un desarrollo
generado de manera equilibrada e integral entre el progreso social, económico y
ambiental de nuestras naciones y de la región.
ACORDAMOS 1. Promover una mirada multidimensional y anclada en el territorio para
asegurar un desarrollo inclusivo y sostenible que responda a las
prioridades locales.
ACORDAMOS 2. Asumir el reto de no dejar a nadie atrás para el cumplimiento de los ODS,
mediante la generación de mejores datos estadísticos, la mayor captación
de información de censos de población, encuestas de hogares, registros
administrativos u otros instrumentos georreferenciados, desglosadas en
todas las variables especificadas en la Agenda 2030, por ingresos, sexo,
edad, raza, origen étnico, estatus migratorio, discapacidad, ubicación
geográfica y otras características pertinentes en los contextos nacionales,
así como el desarrollo de estadísticas económicas robustas que permitan
dar cuenta en forma completa de la inversión social y la distribución del
ingreso y la riqueza.
ACORDAMOS 4. Garantizar la participación de toda la población protagonista de los
programas sociales en todo el ciclo de la política atendiendo a la
intersección de problemáticas como elementos condicionantes de dicha
participación
ACORDAMOS 5. Impulsar las políticas de cuidado como esenciales para asegurar la
sostenibilidad de los logros sociales e imprescindibles para alcanzar el
progreso multidimensional al que aspiran las sociedades en el marco de
su rápida evolución y que reconozcan todas las responsabilidades del
cuidado familiar.
ACORDAMOS 6. Fortalecer el Foro Ministerial de Desarrollo como un espacio de reflexión
e intercambio de experiencias de Política Pública, con un enfoque de ciclo
de vida e integración social orientadas a la generación y coordinación de
acciones desde lo público y lo privado, que tome en consideración las
necesidades, condiciones y particularidades de los grupos poblacionales
con mayores niveles de vulnerabilidad, con una construcción anclada en
la realidad de los territorios específicos, que promueva la inclusión desde
una mirada de igualdad de género, étnica, cultural y social, reconociendo
además las necesidades diferenciadas de la niñez, las juventudes y los
adultos mayores.
ACORDAMOS 7. Favorecer el desarrollo de instituciones estatales y sociales que
promuevan procesos participativos, incluyentes y responsables, que
presten especial atención a los grupos más vulnerables, con el propósito
de identificar y analizar las desigualdades que forman parte de los
problemas que requieren atención prioritaria para lograr el desarrollo y, de
esa forma, preparar las políticas públicas dirigidas a corregir las prácticas
de carácter discriminatorio y las injustas relaciones de poder que dificultan
el progreso.
ACORDAMOS 8. Dedicar especial atención al fortalecimiento de las capacidades y
competencias de las mujeres y las niñas a través de su empoderamiento
como titulares de derechos, y a eliminar las condiciones que generan
desigualdades y se expresan en situaciones de discriminación, violencia de género y exclusión social.
ACORDAMOS 10. Reafirmar el derecho a la participación plena e igualitaria de los pueblos
indígenas y afrodescendientes, como sociedades modernas e inclusivas,
a partir de la coexistencia de diversidades culturales, las cuales deben
convivir con una base de respeto de los derechos humanos.
ACORDAMOS 11. Promover los derechos, el empoderamiento y las políticas antidiscriminación
de la poblaciones afrodescendientes e indígenas de
América Latina y el Caribe para hacer frente a la pobreza y la
desigualdad, afrontar las causas más profundas de la exclusión social
como el racismo, incorporar la perspectiva interseccional que permita
visibilizar y empoderar a las niñas, jóvenes y mujeres, y promover
mejoras en la educación y reducción de la violencia hacia ellos.
ACORDAMOS 12. Asumir el reto de no dejar a nadie atrás para el cumplimiento de los ODS,
mediante la generación de mejores datos estadísticos, la mayor captación
de información de censos de población, encuestas de hogares, registros
administrativos u otros instrumentos georreferenciados, desglosadas en
todas las variables especificadas en la Agenda 2030, por ingresos, sexo,
edad, raza, origen étnico, estatus migratorio, discapacidad, ubicación
geográfica y otras características pertinentes en los contextos nacionales,
así como el desarrollo de estadísticas económicas robustas que permitan
dar cuenta en forma completa de la inversión social y la distribución del
ingreso y la riqueza.
ACORDAMOS 13. Promover un mayor conocimiento y respeto de la diversidad de la
herencia y la cultura de los afrodescendientes e indígenas y de su
contribución al desarrollo de nuestras sociedades a través del fomento de
una actividad cultural inclusiva e integradora.
ACORDAMOS 14. Aprobar y fortalecer marcos jurídicos nacionales, regionales e
internacionales, políticas públicas y programas de lucha contra el
racismo, la discriminación racial, la xenofobia y las formas conexas de
intolerancia a que se enfrentan las poblaciones indígenas y
afrodescendientes, poniendo especial atención en la situación particular
en la que viven las mujeres, las niñas y los varones jóvenes.
ACORDAMOS 15. Promover una política pública integral que coordine la acción de actores
estatales, el sector privado, la sociedad civil, la comunidad científica y
académica, y las agencias de las Naciones Unidas, como estrategia
fundamental implicada en el alcance universal de la Agenda 2030,
aplicando el principio de responsabilidades comunes pero diferenciadas.
ACORDAMOS 16. Promover alianzas con los sectores productivos públicos y privados, con
el norte de la Agenda 2030 y los ODS, para la transformación de nuestras
sociedades en el objetivo de que nadie quede atrás, con especial énfasis
en el trabajo directo sobre las exclusiones duras que sufren las
poblaciones más vulnerables en nuestros países y para una inserción
completa en el mundo del trabajo y la protección social.
ACORDAMOS 17. Impulsar políticas públicas y alianzas con el sector privado que
favorezcan el desarrollo sostenible del sector productivo centrado en
equilibrar los logros económicos, sociales y ambientales, con la finalidad
de impulsar modelos incluyentes de producción y consumo sostenibles.
ACORDAMOS 18. Generar espacios nacionales de diálogo y consulta público-privados, para
analizar los nuevos desafíos y demandas de la educación, la protección
social, la economía del cuidado, y la sustentabilidad ambiental, entre otros
temas.
ACORDAMOS 19. Reconocer las contribuciones sustantivas del PNUD y la CEPAL, que
coadyuvaron al desarrollo exitoso de los trabajos del Foro e instamos a
ambas organizaciones a seguir fortaleciendo el Foro como un espacio de
intercambio, buenas prácticas y construcción colectiva en el área social
para la consecución de los ODS y la Agenda 2030 en la región.
ACORDAMOS 20. Instar al PNUD a que continúe fortaleciendo las acciones de cooperación
en la región para el acompañamiento a las prioridades de desarrollo de
cada país.